Hermanos de la Diócesis de Tlaxcala: Los saludos, con la seguridad de que Nuestra Señora de Ocotlán, nos acompaña en estos momentos adversos.
Que los lamentables sucesos de estos días nos impulsen a dar un paso adelante y ampliar nuestra mirada hacia quienes claman por gestos concretos de solidaridad cristiana.
En Tlaxcala tuvimos daños materiales, pero no pérdidas humanas; ésta es una gracia que recibimos, pero al mismo tiempo es una llamada a la caridad.
Para responder a este llamado, tendremos dos Centros de acopio de víveres y artículos de primera necesidad: uno en sus propias parroquias, impulsado por los grupos de pastoral y personas de buena voluntad, y otro diocesano, que se encuentra a espaldas de la Basílica de Nuestra Señora de Ocotlán.
Además, les comunico que por seguridad de los feligreses y para solidarizarnos con nuestros hermanos que perdieron seres queridos, este año trasladaremos la Fiesta Diocesana de los Niños Mártires al 18 de noviembre del presente, este día también daremos gracias por la Canonización. Agradezco su comprensión.
Pido a los Niños Mártires de Tlaxcala que intercedan por nosotros ante nuestro Padre Dios a fin de que os dé consuelo y fortaleza para superar esta situación adversa que estamos pasando.
21 de septiembre de 2017.
+ Julio César Salcedo Aquino, m.j.
IV Obispo de Tlaxcala