UNA IGLESIA SINODAL EN MISIÓN

Pbro. Lic. Francisco Rodríguez Lara

Quiero empezar a compartir material que ayude al conocimiento y reflexión de los trabajos de la Primera Sesión de la XVI Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos, ya concluida, y que se realizó del 4 al 29 de octubre de 2023 en Ciudad del Vaticano, y al término de la misma se presentó el “informe (relación) de síntesis”, con el título UNA IGLESIA SINODAL EN MISIÓN”, y del que ahora sólo comparto algunos párrafos de la introducción del documento, con la invitación a que todos, en la medida de sus posibilidades, puedan leer el documento completo.

Comparto los siguientes párrafos, que nos dan un acercamiento al contenido general:

“Después de un mes de trabajo, el Señor nos llama ahora a volver a nuestras Iglesias, para transmitir a todos vosotros los frutos de nuestro trabajo, para continuar, juntos, el camino. En Roma estábamos solamente algunos, pero el sentido del camino sinodal iniciado por el Santo Padre es el de involucrar a todos los bautizados. Deseamos ardientemente que esto se cumpla y queremos comprometernos a hacerlo posible. En esta Relación de síntesis recogemos los principales elementos que han salido en el diálogo, en la oración y en los diferentes puntos de vista que han caracterizado estos días. Lo que os informemos personalmente enriquecerá esta síntesis con la totalidad de la experiencia vivida, que ningún escrito puede sustituir. Así podemos daros testimonio de la riqueza que han tenido los momentos de silencio y de escucha, del compartir y de la oración. Compartiremos también que no es fácil escuchar ideas diferentes, sin caer rápido en la tentación de rebatirlas; ofrecer la propia aportación como un don para los otros y no como una certeza absoluta. Pero la gracia del Señor nos ha llevado a hacerlo, a pesar de nuestras limitaciones y, para nosotros ha sido esta una verdadera experiencia de sinodalidad, la hemos comprendido mejor y nos hemos dado cuenta de su valía.

Los trabajos de esta sesión se han desarrollado siguiendo la trayectoria del Instrumentum laboris, que nos invitaba a reflexionar sobre los signos característicos de una Iglesia Sinodal y sobre las dinámicas de comunión, misión y participación que la caracterizan. La discusión sobre las propuestas ha confirmado en su conjunto la bondad del sistema programado. Hemos podido entrar en el meollo de las cuestiones, identificar los tiempos necesarios para profundizarlas, avanzar en un primer núcleo de propuestas. A la luz de los pasos ya dados, la Relación de Síntesis no retoma o reitera todos los contenidos del Instrumentum laboris, sino que relanza los que se han considerado como prioritarios. La Relación de síntesis de ninguna manera es un documento final, sino un instrumento al servicio del discernimiento todavía deberá continuar.

El texto está estructurado en tres partes. La primera describe “El rostro de la Iglesia sinodal”, presentando los principios teológicos que iluminan y dan base a la sinodalidad. En esta parte el estilo de la sinodalidad aparece como un modo de hacer y de obrar en la fe que nace de la contemplación de la Trinidad y valora la unidad y la variedad como riqueza eclesial. La segunda parte, titulada “Todos discípulos, todos misioneros” trata de todos los que están involucrados en la vida y la misión de la Iglesia y de las relaciones entre ellos. En esta parte, la sinodalidad se presenta principalmente como camino conjunto del Pueblo de Dios y como fecundo diálogo de los carismas y ministerios, al servicio del acontecimiento del Reino. La tercera parte se titula: “Tejer lazos, construir comunidad”. En ella, la sinodalidad aparece principalmente como un conjunto de procesos y una red de organismos que sirven al intercambio entre las Iglesias y al diálogo con el mundo.

En cada una de las tres partes, cada capítulo recoge las convergencias, las cuestiones que afrontar y las propuestas surgidas del diálogo. Las convergencias identifican los puntos firmes a los que puede mirar la reflexión: son como un mapa que permite orientarse en el camino y no equivocar la senda. Las cuestiones que afrontar recogen los puntos sobre los que hemos reconocido la necesidad de continuar su profundización teológica, pastoral y canónica: son como los cruces de caminos en los que es necesario pararse, para comprender mejor la dirección que hay que tomar. Las propuestas indican, en cambio, posibles pistas: algunas son sugeridas, otras recomendadas, otras, sin embargo, requeridas con mayor fuerza y determinación. En los próximos meses, las Conferencias Episcopales y las Estructuras Jerárquicas de las Iglesias Orientales Católicas, haciendo de conexión, entre las Iglesia locales y la Secretaría General del Sínodo, tendrán un papel importante en el desarrollo de la reflexión. A partir de las convergencias a las que se llegue, están llamadas a concentrarse sobre las propuestas más relevantes y urgentes, favoreciendo su profundización teológica y pastoral e indicando las implicaciones canónicas”. Sirva este contenido para iniciar un acercamiento para conocer y reflexionar sobre este informe de síntesis.